Torturas finales

Durante muchos años  se ha hablado de las formas de torturar a niños, adolescente y jóvenes. Por ejemplo: no comprarles helado, jalarles las orejas y demás crímenes. Pero existe y ha existido desde antes “La tortura de los exámenes finales”, esa es la peor de todas. Este proceso empieza mayormente dos semanas antes que terminen las clases y equivale a todo lo que hiciste o  no hiciste en el ciclo.

Es domingo, eres consciente que dentro de unas horas será lunes y empezará tu peor semana de terror, encima tienes que presentar tu trabajo final, del cual solo has realizado el 20% y te falta el 80% o sea casi todo, y lo peor de todo es que ese trabajo se lo tienes que presentar al profesor que te cae recontra mal y lo detestas, es el típico profesor “estresado”, aquel que te deja mil trabajos de un día para otro y no le interesan tus problemas, solo le interesa estresarte, es lo que hacen la mayoría de estos profesores, en fin.

Empiezas a llamar a todos tus compañeros de juegos y diversiones y son las 8 de la noche y te esperará la peor noche de tu vida, pero te sientes feliz porque esta noche no la pasarás solo al menos tienes compañía.

Avisas a tu familia que esta noche será larga y que meterás a tu casa a los 8 integrantes de tu grupo y tú madre te mira desconcertada, obviamente te mira así porque nunca metes gente a tu casa para “estudios”, sino para a hacer otra cosa como por ejemplo: comer, reírte o pijamada con tus súper mejores amigas pero  menos para  “estudiar”.

De pronto llega primero el más puntual, siempre en un grupo está el puntual y los dos no tiene una remota idea de lo que van a hacer, una hora después aparecen  los demás, se miran entre todos con cara de: ¿y ahora?

Y empezó, siendo las 10 de la noche, suben a tu cuarto prendes tu pc o laptop, abren el documento y les entra ganas de llorar o suicidarse al ver todos los puntos que les falta por a hacer,  de los cuales solo han hecho dos y optan por dividir el trabajo. A cada uno le corresponde lo que más sabe a hacer y hasta ese entonces, mientras hablan, entran al Facebook, se ríen, rajan de sus otros compañeros, ya son las 12 del mañana y tienen solo 6 horas para acabar todo su trabajo.

Son las 12:30am y no entienden que quiere decir esa pregunta, empiezan a preguntarle a todo el mundo y no saben si escribirle al profesor para que les explique.Pero les da miedo el profesor, les da terror, piensan que  es uno de los orcos del señor de los anillos y mejor prefieren preguntarle al chico, sí ese chico que siempre lo molestan cuando participa, pero tienen sus dudas si les responderá o no, igual terminan preguntándole y el muy maldito les dice “NO SÉ”, y sino lo sabe él, nadie les podrá ayudar, se ven perdidos.

Solo les queda utilizar los métodos más sencillos y aplicar la ley del mínimo esfuerzo: Wikipedia o el Rincón del Vago, se zurran en las advertencias que les dijo el profesor, la misión es acabar con el maldito trabajo de ése profesor que maldijeron hasta su última generación y desearían que algo pase y no llegue mañana. Empiezan a avanzar, van por buen camino ya hay una luz en la oscuridad y se sienten felices y deciden darse un “breake” un “descansito” y continuar, al parecer todo va bien y sí terminarán.

Pero como no puede ser todo tan perfecto para un grupo de estudiantes que se reúne toda madrugada, para realizar su trabajo. Sucede que: El redactor olvidó darle ctrl”G” y guardar su archivo donde estaba su trabajo y todos entran en pánico y quieren matar a su compañero, felizmente gracias a la tecnología existe archivos recientes y se recuperó su trabajo.

Son las 6 de la mañana haz sobrevivido nuevamente a la peor noche de toda tu vida, tienes los dientes amarillos de todo el café que te has metido, unas ojeras que se parecen al cadáver de la novia. No importa cumplieron con su misión y a su profesor no le paso nada. 

Claudia Morales Rojas